sábado, 3 de septiembre de 2011

·Destino ll // Smile even when you are sad =)

Siempre se suele pensar que el destino es algo que no podemos manejar,que no
tenemos la libertad suficiente para tomar decisiones sobre nuestro presente y
nuestro futuro.
Cuenta la leyenda que cuando nacemos tres hilanderas bajan
para tejer nuestra vida y todo lo que en ella vaya a suceder, ya sea bueno o
malo.Durante los tres primeros días de nuestro nacimiento permanecen junto a
nosotros y con sus finos dedos y los mágicos colores de sus hilos bordan
lentamente,al lado de nuestra cuna,lo que nos acontecerá a lo largo de nuestra
vida.
Es curioso el hecho de que estas mismas, las que "escriben" nuestro
porvenir, sean las mismas que pueden ponerle fin en cualquier momento. Una de
ellas mantiene firme las tijeras que pueden cortar el hilo cuando el final de
nuestra historia se acerca...
Eso tan sólo es la leyenda de una historia que
tal vez sea cierta o tal vez sea un invento de unos cuantos para dar significado
a algo de lo que todavía no hemos encontrado explicación,la vida.
Por otra
parte están los que piensan que el futuro es volátil y se encuentra en nuestras
manos el poder de escribirlo.
Para mí la vida es un conjunto de casualidades
que nos llevan a tener que decidir constantemente,y esas decisiones marcaran
nuestro futuro,cada decisión que tomemos nos lleva a tener que renunciar a algo
y con ello a renunciar a un futuro por otro distinto,uno abstracto que no
podemos conocer hasta que no se convierta en nuestro presente.
La vida es
caminar a ciegas confiando en nuestro instinto,es un juego en el que el truco
está en no dejar de jugar por malas que sean las cartas,ya llegará la
posibilidad de una buena jugada,la baraja es muy grande y es inevitable que nos
ocurra eso.
La vida es sonreír aunque nuestros ojos lloren pero no dejar que
el llanto resquebraje nuestros sueños,esos son los que mantendrán viva la
esperanza de un futuro donde sea posible que nuestro cuento acabe con un
"Vivieron felices y comieron perdices...",porque si nuestro futuro lo dibujamos
nosotros,¿por qué no pintarlo de un color alegre?
Puede parecer difícil tomar
las decisiones adecuadas a cada momento para llegar a donde queremos,porque
renunciar a algo suena demasiado amargo.
Y si el destino ya está escrito y la
leyenda es cierta sólo nos queda esperar que nuestro destino este tejido con
hilos de oro,y si no,pienso disfrutarlo aunque me toque jugar con las peores
cartas de la baraja,encontraré algo positivo a cada momento y caminaré con paso firme aunque el terreno esté empedrado.
El destino solo es un futuro
alternativo al que yo quiero vivir pero, ¿por qué perdérselo?...




·Amor ciego

Mientras paseaba por la calle de "La Locura" encontré a un par
de ciegos discutiendo sobre el amor,uno decía saber amar a pesar de no haberlo
visto nunca de cerca, decía saber lo que se siente en un beso a pesar de no
haber saboreado nunca unos labios,otro de ellos pese a haber vivido menos si
había besado,pero pensaba que al ser ciego nunca había visto el amor por lo que
sería un desgraciado toda su vida...Entre ellos se abrió un debate; uno de
ellos,el más joven, planteó la pregunta de por qué nadie miraba con el
corazón,acaso no se puede sentir el amor en las yemas de los dedos cada vez que
acaricias a alguien con cariño,acaso el corazón no habita en el pecho,justo a la
izquierda de donde esconde el alma sus mayores secretos;es qué el amor es algo
tan insípido como el agua...quiso saber lo que pasaría si el amor no fuese solo
algo escrito en la belleza de unos ojos color tierra que nunca podría
contemplar,quiso saber si el amor es algo más que lo que la vista puede
captar,quiso saber si realmente había aprendido a amar y pidió consejo al
anciano.
El otro,ingenió la forma de hacer cambiar de opinión al
joven,respondió con la sabiduría de un corazón ya viejo y maltratado que
aquellas personas que presumen de vista son los que menos ven,que lo que ellos
sienten como algo abstracto por no poder ser detectado por los sentidos era lo
que realmente estaba ahí siempre,rodeandoles, abrazándoles como un amigo,no era
algo material,eran los sentimientos y no se detectaban con la vista...Sólo
alguien que al cerrar los ojos pudiera seguir viendo estaba capacitado para
amar,porque el amor no es la realidad,el amor es imaginación,es soñar,es
crear...
El joven comprendió entonces que él no era solo un ciego,era un
soñador y un creador,porque había sido capaz de imaginarse todas sus curvas a
pesar de no haberla visto nunca,había sido capaz de recrear cada facción de su
cara solo con el sonido de su voz;ahora sabía que el amor si tenía sabor,y era
el más dulce de todos,era el sabor de sus labios;ahora sabía que había aprendido
a amar con ella de maestra...




·La última noche:

Comenzaron con un beso.Inseguro,recatado y tímido;parecía que hasta
el mínimo roce de los labios ocasionaba pudor.
Eleonore alzó la vista para
contemplar su mirada...
Sus ojos le pedían a gritos que le entregara un
último abrazo antes de sumirse en ese "adiós" temporáneo.
Poco a poco fueron
sustituyendo la inocencia del comienzo de la noche por miradas repletas de
erotismo que se clavaban en el cuerpo haciéndolos arder por dentro.
Cada roce
de piel contra piel,cada aliento robado,cada palabra de amor...demostraban que
lo que ellos dos sentían nada ni nadie se lo podría arrebatar.
Una mezcla
homogénea entre dulzura y pasión llenaba la habitación de candor mientras el
reloj parecía haberse parado.Ajenos al tiempo y a prejuicios externos se fundían
en uno solo,la seda de las sábanas resbalaba por su piel y aquellas cuatro
paredes eran testigo de ese acontecimiento.
No importaba el futuro ni podían
recordar su pasado.
Eleonore se había sentido tanto tiempo sola en el mundo
que ahora parecía que solo existía él,Ethan sentía que su mundo era tan solo
ella.
La apretó con fuerza contra él,no quería dejarla marchar de su
lado.
Eleonore comenzó a perderse por completo,se sentía suya,se sentía
mujer,quería amarle con cada poro de su piel...No podría cambiar ese momento por
nada del mundo;un estallido de emociones escaparon de su boca de
unísono.
Un rayo de sol interrumpió a los amantes anunciando la
despedida,sabían que pasaría mucho tiempo hasta que pudieran volver a
verse.
Las lágrimas resbalaban lentamente por las mejillas de
Eleonore,rápidamente se puso su camisa blanca que unas horas antes había dejado
en la silla y que dejaba entrever su cuerpo semidesnudo;se acercó a la ventana
para que él no la viera llorar mientras contemplaba las tímidas olas de la
mañana.
Ethan se sentó sobre la cama para observarla lleno de ternura,después
se acercó a ella rodeando con un abrazo su fina silueta.
La preguntó el
motivo de sus lágrimas y ella le respondió que tenía miedo a que la despedida
fuera definitiva,a que él se olvidara de todo lo que había sentido esa noche,de
que conociera un nuevo amor durante su estancia en la ciudad y de que le entregará
su corazón,ese al que esa noche había sentido tan cerca.
Él la miró a los
ojos inspirándole tranquilidad.
-¿Acaso crees que puedo olvidar la noche en
la que conocí la felicidad,mi pequeña?
Después salió por la puerta de esa
habitación donde dejaba su corazón y la promesa de regresar al lugar donde hizo
suyo al amor de su vida.
Eleonore permaneció inmóvil contemplando como se
alejaba de allí,con la esperanza de que su regreso fuera lo antes posible y la
confianza de que su amor crecería en la distancia.