martes, 14 de junio de 2011

·Infancia:

Quiero volver a ser aquella niña pequeña que no se preocupaba por nada.Aquellos tiempos en lo que lo más importante era ver quien hacia mejor los muñequitos de plastilina o tener más chuches que tus compañeros,quien saltaba mejor a la comba o quien era la princesa en el juego de esa tarde. Cuando los amigos,eran solo amigos y todo se solucionaba con un,''esta no vale,repetimos''. Esa época en la que no me daba vergüenza reir a carcajadas hasta que la mandíbula se saliera de su órbita o llorar desconsoladamente porque aquella muñeca que tanto me gustaba se rompió.Cuando mi mayor complicación era elegir entre el color rosa o azul,para pintar el dibujo que le había dedicado a ese amigo ''especial'' que tanto me gustaba.Pero que ya no está a mi lado.El viento se llevó todos esas horas,esos días,esos años y con ellos pero aún mantiene mis recuerdos más preciados.Ahora que deje atrás a esa niña pienso en todo lo vivido.En los amigos que estan a mi lado aún y los que ya se fueron para no volver.En ese chico ''especial'' que ya ni siquiera me gusta y tampoco sé ni donde está,ni si se acordará de mí,si algún día nos volvemos a encontrar.Ya cambió todo en mi vida.Nuevos amigos,nueva ropa,nuevos problemas,nuevos amores...Y pensar que entonces soñabas con crecer...
Es duro pensar como pasa el tiempo,ver día a día como los problemas van de un lado para otro y se van haciendo más y más grandes en la misma proporción en la que tú creces.Pero bueno,no todo van a ser lágrimas por no poder volver a vivirlo,¿no? También hay cosas buenas de haber madurado. Te das cuenta de que en la vida hay más cosas que te hacen feliz. Salir un sábado hasta desmadrarte,ver a esa persona especial que ahora puedes tener más cerca de tí que cuando tenias siete años. Hay cosas que hubiera preferido que se quedarán para siempre a mi lado,pero desgraciadamente,no puedo elegir mi destino.Pero lo que de verdad,de verdad,de verdad estará siempre en mí,será ese espíritu de niña pequeña tan preciado que siempre estará en mi corazón y que convertirá mi vida en un cuento de hadas a cada momento.

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